Telangiectasias

En la Unidad de Dermatología del Hospital La Moraleja contamos con un equipo médico especializado en el tratamiento de las telangiectasias.

Las telangiectasias o arañas vasculares suelen ser benignas, aunque en algunos casos están asociadas a enfermedades subyacentes. Precisamente por eso, es imprescindible contar con un buen diagnóstico clínico.

¿Qué son las telangiectasias?

También conocidas como varices en la cara, las telangiectasias son dilataciones de pequeños vasos sanguíneos superficiales que se vuelven visibles a través de la piel o de las mucosas. Uno de los rasgos que las definen es que tienen carácter permanente y no desaparecen por sí solas.

Se manifiestan en forma de líneas finas o ramificaciones que tienen una tonalidad rojiza, azul o violeta. Son esas venitas que resultan visibles en la cara, especialmente en la zona alrededor de la nariz y las mejillas. No obstante, también pueden estar presentes en la cara externa de los muslos y las pantorrillas.

Para entender qué es una telangiectasia desde el punto de vista médico, hay que analizarlas como lesiones vasculares que se hacen visibles cuando los vasos sanguíneos pierden su tono vascular normal y se dilatan de forma permanente. 

En la mayoría de los casos su presencia no supone más que una ligera alteración estética, especialmente cuando se trata de telangiectasias faciales. Sin embargo, en algunos casos puede ser un signo clínico que avisa de la existencia de patologías subyacentes. Por eso, si su número aumenta o aparecen en regiones no habituales, hay que consultar con el especialista.

Causas de las telangiectasias

Las razones de su aparición pueden ser muy variadas. De hecho, en muchos casos se presentan de forma idiopática, sin una causa aparente. Cuando hay una razón para su presencia, esta puede ser:

• Factores hereditarios: La telangiectasia hemorrágica hereditaria es una enfermedad genética. Por tanto, si en la familia hay antecedentes, es probable que quienes proceden de ella tengan predisposición a su aparición.
• Cambios hormonales: En el caso de las mujeres, tanto durante el embarazo como durante la menopausia, hay más riesgo de que aparezcan las telangiectasias como consecuencia de la acción de los estrógenos.
• Exposición solar prolongada: El daño acumulado en la piel por el efecto de los rayos solares también aumenta el riesgo de que se dilaten los capilares superficiales.
• Traumatismos cutáneos: Los golpes en la cara pueden alterar la estructura vascular local y favorecer la aparición de varices en esta zona.
• Trastornos dermatológicos o sistémicos: Hay enfermedades como la rosácea, el lupus o la esclerodermia que incluyen las telangiectasias entre sus síntomas. No siempre van a aparecer, pero el riesgo es más elevado que en personas que no padecen estas enfermedades.
• Consumo prolongado de corticosteroides tópicos: Estos medicamentos pueden debilitar las paredes vasculares, aumentando el riesgo de que aparezcan telangiectasias.
• Estilo de vida: Condiciones como el tabaquismo, el alcoholismo, el sedentarismo o la exposición constante al calor extremo pueden favorecer la aparición de estas lesiones vasculares.

¿Cómo eliminar las telangiectasias?

El tratamiento más indicado puede variar según el caso concreto, porque hay que tener en cuenta la condición clínica previa del paciente, la localización de las lesiones, el número y el tamaño de las mismas, así como las posibles causas de su aparición.

Escleroterapia

Se lleva a cabo cuando las lesiones vasculares están en las piernas. El tratamiento consiste en inyectar una sustancia esclerosante que cierra el vaso dilatado.

Esta metodología es segura y muy efectiva, pero es posible que el paciente tenga que pasar por varias sesiones antes de poder ver los resultados definitivos.

Láser vascular

Para las telangiectasias faciales se puede utilizar el láser vascular, que emplea un haz de luz selectivo que se encarga de coagular los capilares afectados sin dañar en ningún caso la piel circundante.

Luz pulsada intensa

El tratamiento IPL se aplica en lesiones pequeñas o múltiples, especialmente cuando están en la cara. Aunque su acción es más difusa que la del láser, resulta muy indicada para el tratamiento de zonas amplias.

Electrocoagulación o termocoagulación

Son tratamientos que consisten en la aplicación de una corriente eléctrica o térmica que se encarga de eliminar el vaso visible.

¿Se pueden evitar las telangiectasias?

No siempre es posible prevenir su aparición al 100 %, pero algunos cambios de hábitos pueden reducir en gran medida el riesgo.

Utilizar protector solar

Aplicar a diario y durante todo el año un protector solar en el rostro que tenga un factor de protección alto (mínimo 30 SPF) ayuda a proteger los capilares frente a la radiación ultravioleta. Esto reduce de forma notable el riesgo de que aparezcan varices en la cara como consecuencia del daño solar, a la vez que evita la aparición de manchas que pueden derivar en un melanoma.

Evitar fuentes de calor directo

En la medida de lo posible no hay que exponerse con frecuencia a fuentes de calor directas como saunas, baños calientes o estar cerca de un radiador, porque el calor favorece la vasodilatación excesiva en zonas sensibles como el rostro.

Llevar un estilo de vida activo

Practicar ejercicio de forma regular mejora el retorno venoso, favorece la circulación y previene el estancamiento sanguíneo, reduciendo el riesgo de lesiones vasculares.

Las telangiectasias no son relevantes a nivel médico, pero sí a nivel estético. Por eso, es importante tomar medidas de prevención y, si aparecen, consultar con un especialista por si hubiera una enfermedad subyacente o para eliminarlas de forma segura.

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